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DE VERSERÍA
Décimas y versos del hijo del vendaval
David Celestinos Isaacs
Huasteco de corazón
No hace falta dilucidar
si huasteco de corazón
es de mayor peso y razón
que un corazón huasteco da
aunque origen es nacer allá
amor y cariño cuentan
lo que a las almas despiertan
es valorar la cultura
la nuestra, la que perdura
por eso estamos alerta.
Puestos a guardar tradición
estamos, huastecos o no,
ciertos que la hora llegó
para reivindicar el son,
el huapango nuestra pasión
que en todo lo propalamos,
pues nuestra música amamos
de norte a sur, de este a oeste
la gran huasteca terrestre
es la que nos hace hermanos.
En el huapango todos caben:
trovadores, decimistas,
músicos y repentistas
bailadores que bien saben
zapatear duro y suave,
y cantantes de falsete
que elevan la voz de suerte
que parecen cual jilgueros
¿y qué decir de guitarreros
y violines de toques fuertes?
De Tamaulipas e Hidalgo,
San Luis Potosí y Puebla,
lugares de lluvia y niebla,
Querétaro, poco es algo,
Veracruz con su fandango
son las Huastecas hermanas
las que en cada mañana
se alegran con nuestro son
sean de corazón o razón
¡cantan a la tierra nana!
Por eso lo digo ahorita
sea despacio o quedito
no soy de los que me agüito
y decirlo nada me quita:
¡Viva la Huasteca rica!
sean huastecos de corazón
o bien huastecos de pasión,
hermanados en el huapango
festejemos el fandango
¡ahora sí, todos somos son!
Ciudad de México, 10 de julio de 2012