Recordando una mañana  

que inolvidable ha de ser, 

cuando desde mi ventana 

me gustó nomás al ver 

aquella rosa temprana 

de aquel lindo amanecer. 

 

Te conocí en un instante 

y creí ser soñador, 

pero eres tan importante, 

para mí eres un primor, 

que hoy me propongo constante 

ser el dueño de tu amor. 

 

Recuerdo la vez aquella 

mi amor encendido al tuyo 

la noche apacible y bella, 

el jardín en el arrullo, 

en cada nube una estrella 

y en cada rosa un cocuyo. 

para el huapango La Rosa 

* 

Cabalgando en el recinto 

por el rancho de la Peña 

ha de ser por el instinto 

nada más le hago una seña 

y mi caballo repinto 

corre veloz por la breña. 

  

Corre, corre, caballito 

corre por esa pradera 

corre ligero y bonito 

llega por esa ladera 

corre por que mi amorcito 

en mi ranchito me espera. 

para el huapango El caballito 

  

* 

Si la muerte ya llegó 

nada hay para remediar 

Dios una vida nos dio 

y otra no hay para comprar 

es la ley que decretó 

y no la puede cambiar. 

  

No hay tiempo de despedida 

todo acaba en un segundo 

sólo nos queda en la vida 

tristeza y dolor profundo 

cuando una madre querida 

se ha ausentado de este mundo. 

  

Mi madre, pura y verdad, 

ya cumplió con su destino 

ahora que en el cielo está, 

con Dios, el creador divino, 

le pido que desde allá 

me guie por el buen camino. 

 para el huapango El huerfanito 

* 

Es una dicha encontrar 

maravilla tu boca 

que hasta me pongo a pensar 

no sé por qué me provoca 

y la quisiera besar. 

 

La azucena es una flor 

una flora perfumada 

así se llama mi amor 

la comparo con mi amada 

porque al nombre le hace honor. 

para el huapango La azucena